Tarea pendiente: poner a Perú en la web

Siempre me ha gustado pensar que Perú es un país estrella. Son pocos los territorios en el mundo que pueden compararse con Perú a nivel de variedad de recursos o de su calidad. Hasta los productos que no tienen origen peruano terminan siendo, muchas veces, mejores aquí que en donde son originalmente.

Algo falta, creo yo, para que Perú pueda comenzar a crecer a través de la internacionalización masiva de los productos y servicios que ofrece: y es la masificación de la web peruana.

No estoy hablando de las conexiones a Internet. Estoy hablando de la creación de cientos de miles de sitios web peruanos aptos para competir a nivel internacional. Con eso, y con un marketing digital correctamente implementado, Perú podría ganar muy fácilmente presencia internacional, ampliación de mercados, mayores ingresos gracias a las ventas internacionales, formalización de las empresas con su consiguiente mejoras en los sueldos y, a la larga, una masiva de la reducción de la informalidad que tanto daño nos hace como nación.

¿Por qué pienso que el poner a Perú en la web nos ayudaría? Porque es una experiencia que se aprecia en otros países que ya han desarrollado su presencia en Internet. Estados Unidos tiene empresas de tecnología que hoy se consideran gigantescas. China tiene tantas ventas de comercio electrónico que hace tiempo se ha convertido en el rey del comercio internacional. Perú, en cambio, todavía está en la etapa de «¡yo también quiero mi página web!» y esta es, sin duda, una oportunidad perdida.

¿Qué es lo que necesitaría el país para poder fortalecer su presencia en la web? Creo que se puede empezar por cuatro grandes cosas:

La primera es ayudar a todos aquellos que quieran emprender en la web a hacer más conocidas sus propuestas. Sé que hay concursos de financiamiento, pero es más que claro que esto no es suficiente. Sin financiamiento, la gran mayoría de estos proyectos mueren. ¿Por qué mueren, si la web ofrece docenas de maneras distintas de ganar dinero para financiar otros proyectos?

La segunda es ayudar a todos aquellos que deseen trabajar en marketing digital (en todas sus formas) a profesionalizarse. Esto podría entenderse bastante mal, así que déjame precisarlo un poco: No quiero decir que no haya mercadólogos digitales profesionales en el país. Lo que quiero decir es que, lamentablemente, son pocos los que están aptos para poder trabajar en proyectos grandes e internacionales. Esto podría corregirse con algo más de capacitación y muchísimas horas de lectura, pero sería mucho más sencillo lograrlo con mentores y con la práctica.

La tercera es ayudar a todos aquellos que deseen iniciar un blog a hacerlo de una manera organizada, que pueda dar frutos a largo plazo. No hay marketing digital serio sin blogueros. Son vitales. Y, al mismo tiempo, ningún proyecto de blog traerá frutos al cabo de unos pocos meses. Todos requieren un plan, un grupo de aliados y muchos, pero muchos lectores. ¿Y de dónde se sacan estas cosas? De buenos mercadólogos y de otros blogueros.

La cuarta es perseverancia. Los proyectos web exitosos suelen tardar años en ganarse un nombre. No son muchos los que resisten solos, por eso es necesario ayudarles.

Hasta la próxima.

Esta página web usa cookies.